
A pesar de la variedad de personalidades y actitudes por ahí, todavía se puede categorizar gente en dos grupos: los portadores de problemas y los solucionadores de problemas. Cuando le preguntas a un portador acerca de un problema, se escucha sobre el problema y nada más. Todos hemos trabajado con estas personas que pueden pasar el día hablándote acerca de un problema, sin llegar nunca a estar cerca de una solución.
Por el contrario, cuando se le pregunta a un solucionador de problemas acerca de un problema, se escucha sobre el problema, pero también se escuchará algunas soluciones posibles. Para estas personas, la separación de los problemas y soluciones es tan ridícula como la separación de lo húmedo del agua. No importa cuál sea la actitud particular que estás buscando contratar, querrás que esa persona tenga una predisposición a solucionar problemas.
Echemos un vistazo a cómo se aplica esto a tres preguntas de comportamiento en entrevistas de trabajo.